Cuando se planifica la remodelación de una casa, puede resultar tentador pasar a la emocionante fase de elegir nuevos colores de pintura, accesorios y complementos como muebles de cocina, baño y recamaras, pero para que el remodelar sea una idea salga bien, hay que pensar en varias cosas antes de empezar.
Conozca su objetivo final
Antes de decidir el alcance de la reforma, debe saber cuál es el objetivo final de su casa. ¿Está renovando para aumentar el valor de reventa de su casa, o se va a quedar en ella durante años? Tenga en cuenta el estado de su barrio antes de empezar y sepa qué renovaciones suponen un buen retorno de la inversión y cuáles se considerarán excesivas para la zona. Tener un plan específico para su futuro le ayudará a decidir la profundidad de su proyecto.
Tener un presupuesto
Conocer su presupuesto -y ceñirse a él- es una de las partes más importantes de la planificación de la renovación. Recuerde añadir un fondo de contingencia para cualquier gasto inesperado -y prevea utilizarlo-, así como para gastos imprevistos, como el coste de salir a comer fuera para una reforma de la cocina, o incluso para coger un hotel por una o dos noches. Puede ser fácil querer una renovación de primera línea, pero quizás todo lo que necesite sean algunas mejoras baratas que hagan que su casa parezca más cara. Investigue y planifique su presupuesto antes de levantar un martillo.
Conoce tus límites
Las reformas de bricolaje son una forma estupenda de ahorrar dinero, tener una sensación de logro e implicar a toda la familia, pero pueden resultar desastrosas si no sabes lo que estás haciendo. Conoce las tareas que puedes abordar con seguridad y las que deben ser tratadas por profesionales, como un muro de carga potencial, el amianto o la pintura con plomo.
Empaquetar
Para que cualquier remodelación de la casa sea lo más sencilla posible, desordene, empaque o traslade todos los artículos que se encuentren en la zona de renovación. Para una remodelación de toda la casa, considere la posibilidad de alquilar una taquilla fuera del sitio o un almacén en el sitio para mantener todas sus pertenencias seguras y limpias durante el proceso.
Haz una lista maestra
Para tener más posibilidades de éxito, y para ayudar en el proceso de elaboración del presupuesto, haz una lista maestra de los artículos que necesitas, desde las tareas administrativas, como los permisos, hasta los rodillos para la pintura. Resulta útil separar la lista en función de los artículos que tienes y los que necesitas comprar. En el caso de las herramientas, hacer una lista puede ayudarte a decidir qué herramientas puedes alquilar para ahorrar costes en lugar de comprarlas nuevas.
Programar la limpieza
Después de un largo día de reformas, puede ser tentador apagar la luz y dejar el desorden para mañana. Por desgracia, esto puede provocar retrasos, pérdida de herramientas y pérdida de cordura en el camino. Asegúrese de anotar en su plan de renovación una cantidad de tiempo suficiente para limpiar al final del día.
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