Aprender a lavar la ropa no es difícil. Los tejidos, los detergentes y las máquinas actuales eliminan la mayor parte del misterio y los errores del proceso. Sigue estos pasos básicos para lavar la ropa y tendrás ropa limpia para usarla mañana.
Sin embargo, antes de empezar, determina si tu ropa realmente necesita ser lavada. Ahorrarás tiempo y dinero si sigues estos trucos de lavandería para estar al tanto de la ropa.
Comprueba las etiquetas de cuidado de tus prendas y ropa de cama. Ellas te dirán si una prenda puede ser lavada a máquina o no. Además, cada tipo de tejido tiene unas propiedades que determinan cómo reacciona al calor, al agua y a los disolventes de limpieza:
Coloca en pilas separadas todas las prendas cuya etiqueta diga “lavar por separado” o “lavar a mano”. Si la etiqueta dice “lavar en seco”, créala y métela en una bolsa para llevarla a la tintorería.
No hay que arriesgarse a dañar ningún tejido especial por intentar ahorrar tiempo o dinero y meterlo en la lavadora. En el futuro, intenta evitar comprar prendas delicadas si prefieres no ocuparte de los cuidados especiales de la lavandería.
Empieza por clasificar la ropa por colores:
- Los blancos, los pasteles, los grises claros y los estampados de fondo blanco irán en una sola pila.
- Las prendas de colores intensos -negro, rojo, azul marino, marrón, gris oscuro- van en otra pila.
- La ropa muy sucia debe lavarse por separado.
- Clasificación de la ropa en claros y oscuros
- Ordenar de nuevo
Ordene cada pila una vez más por tipo de tejido. Por ejemplo, en la pila de blancos, separe las toallas y las sábanas de la ropa. En los colores oscuros, separe las camisetas y los vaqueros de las prendas más ligeras, como las blusas y las camisas de vestir.
El lavado por tipo de tejido le permite utilizar diferentes temperaturas de agua y mantiene los ciclos de secado sencillos. Para reducir las pelusas, nunca lave juntos los tejidos que producen pelusas y los que las atraen.
Si no hay suficientes prendas para una carga completa de lavadora de cada tipo de tejido y tiene prisa, puede lavar todas las prendas de cada color juntas. Sólo asegúrese de elegir el ciclo de la lavadora para las prendas más delicadas en la carga.
Elije un detergente
Seleccione un detergente multiuso para la ropa. Lee las instrucciones para determinar la cantidad que debes utilizar en función del tamaño de la carga.
Si tu ropa tiene manchas, trátala antes de lavarla para que no se fije. Basta con aplicar un quitamanchas o frotar con un poco de detergente para ropa.
Añade el detergente al tambor de la lavadora o al dispensador antes de cargarla. Esto evitará que queden residuos en la ropa.
Elije la temperatura del agua y el ciclo
A menos que su ropa esté llena de suciedad y muy manchada, el lavado en agua fría le servirá para evitar la mayoría de los desastres de lavado.
La excepción es la ropa interior de algodón y las sábanas, que necesitan agua caliente para eliminar la grasa corporal. La ropa de cama y las toallas deben lavarse a la temperatura más alta recomendada al menos cada dos lavados para higienizarlas.
Independientemente de la temperatura, aclare siempre con agua fría.
También querrá elegir el mejor ciclo de lavado para los tejidos de la carga. El ciclo “normal” estará bien para la mayoría de las cargas, pero es posible que tenga que usar “prensa permanente” o “delicado” para ciertos tejidos. El ciclo “Heavy-duty” es ideal para artículos como vaqueros y toallas.
Comprobación final
Tómate un poco de tiempo para comprobar todo antes de cargar la lavadora. Esto le ahorrará cualquier error de última hora.
Busca cualquier mancha y trátala previamente. Algunos tipos de manchas requieren técnicas especiales para eliminarlas, mientras que muchas pueden tratarse con un tratamiento de manchas. También hay un enfoque adecuado para las manchas misteriosas cuando no estás seguro de qué las ha causado.
Además, comprueba que todos los bolsillos estén vacíos tampoco hay pañuelos ni papel para evitar desastres. Quítate los accesorios, como cinturones y joyas.
Carga la lavadora
Carga las prendas en la lavadora de una en una, asegurándose de que no están amontonadas. No llene demasiado la lavadora. La ropa necesita espacio para moverse en el agua.
Para proteger los acabados de los tejidos y reducir el aspecto de “lavado”, dé la vuelta a las prendas de punto, pana, tejidos con textura y colores oscuros.
Saque rápidamente la ropa húmeda de la lavadora para reducir las arrugas y evitar el moho. Cuelgue las prendas para que se sequen al aire, colóquelas en posición horizontal para que se sequen o métalas en la secadora.
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